Rusia y Japón quieren explorar la Luna, pero a lo grande.
En la Conferencia Mundial de Exploración Espacial (Global Space Exploration Conference), que comenzó el 22 de mayo, el mismo día que SpaceX lanzó con éxito su cápsula espacial Dragon hacia la ISS, Rusia y Japón expusieron sus planes para la exploración espacial, ambos centrados en el satélite natural de la Tierra, la Luna.
«No estamos hablando de repetir lo que la humanidad logró hace 40 años. Estamos hablando de establecer bases permanentes», dijo Vladimir Popovkin, el jefe de Roscosmos, la agencia espacial rusa.
Los objetivos de exploración espacial de Japón para el futuro próximo son similares a las de Rusia. «Estamos mirando a la luna como nuestra próxima meta de exploración humana», dijo Yuichi Yamaura, director ejecutivo asociado de la JAXA, la Agencia Espacial Japonesa.
Curiosamente, y a pesar de que fue el primer país en enviar con éxito astronautas humanos a la Luna, los Estados Unidos no están tan interesado en la exploración de la Luna, como Rusia y Japón.
Dentro de los planes de la NASA para los próximos 25 años de exploración espacial, cuentan con dos campos principales: establecer una base lunar para el 2020 o enviar astronautas a un asteroide. El presidente Barack Obama favorece la segunda opción, pero eso podría cambiar después de las elecciones de noviembre.
Personalmente creo que a mediano y largo plazo puede ser más beneficioso tener bases en la Luna, que enviar seres humanos a un asteroide, aunque si de mí dependiera, la opción número uno sería enviar seres humanos a Marte, pero eso ya está un poco más lejos de nuestro alcance.