El Presidente Ejecutivo (CEO) de RIM, Thorsten Heins ha explicado por qué la compañía ha retrasado la llegada de dispositivos con BlackBerry 10 hasta el 2013, aunque admitió que su teléfono personal es un Samsung Galaxy S III.
Después de unas semanas turbulentas, Heins ha vuelto a la lucha, y en una entrevista, para CIO.com, explicó que el retraso de BlackBerry 10 era lo mejor para la compañía.
«De hecho, podría haber mantenido el calendario, si hubiera hecho un sacrificio en la calidad y la estabilidad de la plataforma. Y decidí no hacer eso, porque tengo que asegurarme de que cuando entregamos un BlackBerry, su calidad sea la mejor.»
Heins también respondió a los críticos que afirmaban que la empresa no había sido lo suficientemente innovadora en el pasado y que esta era la razón fundamental por la que había perdido terreno frente a los fabricantes rivales:
«No perdimos innovación. Creo que nos perdimos en la comprensión de que las tendencias estaban cambiando, especialmente en los Estados Unidos, y en el entendimiento de que nuestro posicionamiento y nuestra propuesta de valor en el mercado de los Estados Unidos no estaban siguiendo ese cambio de tendencia.»
Esta falta de «entendimiento» se evidenció específicamente con la tecnología 4G y LTE, y Heins admitió que RIM no invirtió en dichas tecnologías tanto como debieron haber hecho.
Respecto a los rumores que citan una posible compra de la empresa, presumiblemente por parte de Microsoft, Heins dijo que están muy lejos de la realidad. Él confía en que a pesar de que RIM ha reducido el número de dispositivos enviados, la calidad de estos, junto con BlackBerry 10 harán que la empresa regrese a sus glorias pasadas.
«En enero, con la llegada de dispositivos completamente táctiles y QWERTY, creo que recuperaremos la fe en RIM. Eso es en lo que estamos trabajando.»
Mientras es evidente que Heins aún cree en la marca BlackBerry, admitió que mantiene una estrecha vigilancia sobre la competencia, tanto que dijo que está usando un teléfono Samsung Galaxy S III, como dispositivo secundario.
Personalmente creo que está última declaración estuvo de más, ya que envía señales confusas a los usuarios de BlackBerry, que dirán: ‘Si el CEO usa un Android, por qué tengo yo que seguir esperando por un BlackBerry mejor’. Este es el tipo de errores que alguien como Steve Jobs no cometió nunca, que Tim Cook no cometerá, y tampoco me imagino al CEO de Samsung diciendo que el usa un iPhone, aun cuando sea verdad.