Hasta hace relativamente poco tiempo, digitalizar un libro era una tarea ardua y agotadora, y que en muchos casos era realizada por una sola persona. A principios del siglo 21 los equipos de digitalización especializados en libros empezaron a facilitar las tareas y a reducir el tiempo de digitalización, pero nada tan rápido como el escáner BFS-Auto del Ishikawa Oku Laboratory.
BFS-Auto puede digitalizar (escanear) un libro en alta definición a una velocidad de más de 250 páginas por minuto (ppm) utilizando el formato multimedia original. Esta actuación se realiza mediante tres puntos clave: pase de páginas de alta velocidad completamente automatizado, reconocimiento 3D en tiempo real de las vueltas de páginas y restauración de alta precisión a una imagen de documento plana.
Hoy en día prácticamente todo gira en torno a lo digital, y los libros no son la excepción. En el mundo editorial, la transición del formato impreso a digital se ha hecho más obvia, y equipos como este serán de mucha ayuda. Sobre todo en para bibliotecas que se especializan en libros antiguos (fuera de circulación) o con ediciones que no están disponibles en formato digital.
La empresa planea hacer el sistema comercialmente disponible el próximo año 2013, pero no se ha especificado el precio de venta.