Los fabricantes chinos de equipos móviles han sido previamente criticados por algunos países debido a la sospecha de existencia de puertas traseras en sus productos. Tanto así que Estados Unidos prohibió a varios departamentos gubernamentales importantes, incluyendo la NASA, y los departamentos de justicia y comercio, la compra o el uso de dispositivos móviles y tecnología informática provenientes de China.
Personalmente nunca me he creído estás acusaciones, y creo que no son más que una táctica usada por el gobierno estadounidense y otros gobiernos occidentales para evitar el avance masivo de los dispositivos móviles chinos en occidente, a la vez que protegen las marcas locales.
Pues bien, esta vez le ha tocado el turno a uno de los fabricantes de teléfonos inteligentes de China, Xiaomi, del cual se dice que envía secretamente y sin permiso del usuario, información personal (incluyendo mensajes SMS y fotos) desde el dispositivo y directamente hacia servidores en Beijing, China.
La voz de alerta la han dado investigadores de seguridad de la firma finlandesa F-Secure Antivirus, quienes alegan que específicamente los teléfonos Xiaomi RedMi 1S envían un montón de datos personales y sensibles a «api.account.xiaomi.com», un servidor ubicado en China.
Alguna de la información supuestamente enviada incluye:
- El número IMEI del teléfono
- El número IMSI del teléfono (a través de MI Cloud)
- Tus contactos y sus detalles
- Mensajes de texto
Personalmente me parece sumamente sospechoso que justo ahora que Xiaomi está empezando a despuntar en el mercado global de smartphones, aparezcan acusaciones de este tipo. Xiaomi es una empresa relativamente nueva, con apenas 4 años de existencia, pero se han convertido en la marca más popular en China, por encima de Samsung y actualmente son el quinto mayor fabricante de smartphones del mundo.
Está claro que de seguir creciendo al mismo ritmo, en poco tiempo Xiaomi podría convertirse en la marca más vendida del mundo, dejando muy por detrás marcas como Apple y Samsung. Y eso es algo que occidente no permitirá, al menos no, sin oponer resistencia.
A través de una entrada en su blog, Hugo Barra, vicepresidente internacional de Xiaomi niega todas las acusaciones de espionaje realizadas por F-Secure y otros expertos en seguridad.
Personalmente prefiero creerle a Xiaomi, y en caso de que Xiaomi, o cualquier otra de las marcas populares chinas como Lenovo o Huawei realmente extraigan datos de los usuarios desde sus teléfonos, tampoco es algo para tirarse de los pelos, pues al fin y al cabo, es muy probable que los otros fabricantes lleven años haciendo lo mismo.