KFC, la famosa cadena americana de comida rápida, recientemente tuvo la que a primera vista parece una gran idea: cajas de cartón con cargador integrado para el móvil.
KFC lanzó en la India sus nuevas Watt-A-Box, que no son más que cajas de cartón que pueden cargar tu teléfono inteligente, mientras te comes tu pollo frito.
Lo más lógico es pensar que los clientes apreciarán un poco esta nueva iniciativa de KFC de intentar mantener cargados sus teléfonos inteligentes mientras que comen. Pero no ha sido así. De hecho, el problema es que la respuesta no ha sido precisamente positiva.
Los usuarios que han probado las cajas Watt-A-Box en la India se quejan de que las mismas no ofrecen una potencia de carga decente. Según Popular Science, los clientes están informando que consiguen un aumento de entre un 17% y 20% en la carga de la batería en 30 minutos.
Es verdad que un 20% de incremento de carga tras media hora no es nada, pero creo que a veces somos demasiados exigentes. Es decir, no estamos pagando nada por el servicio de carga, es un servicio añadido que KFC ofrece de manera gratuita y que no están obligados a dar.
Esperemos que esta respuesta negativa hacia las Watt-A-Box en India no termine matando esta iniciativa antes de que pueda exportarse a otros mercados.