Bien sea para los estudios, para el trabajo o para completar todas las tareas de nuestro día a día, muchas veces sentimos que nos falta tiempo para hacer cosas. O sentimos que no hacemos las cosas que hacemos todo lo bien que podríamos. Por eso te traemos cinco consejos muy útiles y breves para mejorar tu productividad en tu día a día.
1- Programa tiempos concretos para las cosas importantes
Imagina que tienes que hacer un trabajo para la escuela o que tienes que organizar una presentación para tu trabajo. Lo ideal es decirte a ti mismo que tienes 2 o 3 horas al día para hacerlo. Si decides hacer algo importante en un periodo de tiempo relativamente corto, te concentras mejor porque focalizas toda tu atención en lo que estás haciendo y evitas aplazar la tarea.
«Cuando sabes que tienes tiempo para hacer algo, siempre lo vas a dejar para el último momento. Oblígate a hacerlo cuanto antes y en el menor tiempo posible».
2- Responde a todos tus mensajes con 5 frases o menos
Actualmente la comunicación por mensajería instantánea es el pan de cada día, y si sumamos el tiempo que invertimos respondiendo a mensajes de chat, correos electrónicos y comentarios en las redes sociales… Nos sale una buena cantidad de tiempo. Por lo que debemos intentar responder con brevedad y claridad. Piensa lo que vas a decir antes de escribirlo. Piensa en lo que quieres decir para que así tu mensaje sea lo mas efectivo posible y no haga que quien lo lea se pierda en un mar de explicaciones.
«Lo bueno, si breve, dos veces bueno»
3- Limpia todo después de terminar algo
Si has terminado de cocinar, limpia la cocina. Si has terminado de trabajar en el escritorio, límpialo. Esto hará que estés predispuesto a volver a trabajar en ese espacio. Si sales a correr, después de correr deja todo colocado para cuando vuelvas a ir a correr. Piensa que vas a volver a utilizar ese espacio y esas herramientas y que se trabaja mejor en un entorno ordenado.
«Siempre es agradable encontrarse las cosas colocadas y limpias. Encárgate de hacerlo tu el día anterior.»
4- Multitarea
Haz una lista de cosas que no requieran tu atención plena, como limpiar, fregar los platos, hacer ejercicio… Y una vez tengas todo apuntado, piensa en cosas que puedes hacer de forma simultánea y que sean productivas. Puedes escuchar audio libros, charlas de motivación, Podcast que traten sobre temas que te interesen, la lista es infinita. De esta forma conviertes un tiempo «poco» productivo en algo que te ayuda a crecer y a aprender.
5- Evita que te distraigan
En muchas ocasiones no somos nosotros quienes nos distraemos con cualquier cosa, muchas veces alguien que no tiene nada que hacer decide distraerse con nosotros, así que hay que evitar que esto pase. Existen muchos métodos para evitar que otras personas interfieran en tu tiempo de trabajo. Un clásico es ponerte auriculares cuando estás trabajando, aunque no estés escuchando nada. Es un pequeño truco para filtrar a las personas que no tienen nada importante que decirte, si no es importante, no te molestarán.
Lo ideal es llegar a un acuerdo y comunicar a las personas de tu entorno cuales son tus horas de trabajo/estudio/ejercicio para que no interfieran en ellas. Si sabes lo que quieres conseguir, debes ser claro con las personas que pueden entorpecer o prolongar el tiempo que te va a tomar hacer tus cosas.
Estos 5 consejos son muy potentes si los aplicas en tu día a día. Pero recuerda, solo funcionan si los haces. La productividad requiere compromiso y esfuerzo constante. Quizá otro consejo sería «busca soluciones y no problemas».