El gobierno de los Estados Unidos ha ordenado a Google entregar los datos de los usuarios que vean ciertos tipos de videos en la plataforma de YouTube.
A continuación te explico qué quiere decir esto exactamente y cómo lo ha justificado el gobierno estadounidense.
La excusa perfecta para clasificarnos
Resulta que en YouTube existe un usuario anónimo llamado elonmuskwhm, al cual se le abrió una investigación federal debido a que el mismo compra Bitcoins a cambio de efectivo a través de YouTube. O sea, tu le das bitcoins, y el te daba dólares.
Obviamente, esto es ilegal, ya que viola las leyes estadounidenses de lavado de activos y de evasión de impuestos, al operar un negocio de intercambio de divisas sin licencia.
Entiendo que quieran saber quien es esa persona y de dónde sale su dinero, pero nada más. Un caso particular, no puede extrapolarse a todos los usuarios, y mucho menos a nivel global.
Posteriormente, agentes federales encubiertos publicaron tutoriales de YouTube para mapear mediante drones y software de realidad aumentada, luego pidieron a Google información sobre quién había visto esos videos, que en conjunto tenían un total de 30.000 visualizaciones.
En este caso, el propio gobierno ha tendido el cebo, para luego investigar a quien lo pique.
Em ambos casos, el gobierno estadounidense ha ordenado a Google proporcionar los nombres completos, dirección postal, direcciones IP, número de teléfono, correo electrónico, datos de visualización y toda la información de la que disponga Google sobre todos los usuarios que hayan visto esos vídeos.
Trampas, negligencia y espionaje
Los expertos en privacidad creen que ambas órdenes son inconstitucionales porque violan las protecciones de la Primera y Cuarta Enmienda que cubren la libertad de expresión y la libertad de registros irrazonables.
Según Albert Fox-Cahn, director ejecutivo del Surveillance Technology Oversight Project:
“Este es el último capítulo de una tendencia inquietante en la que vemos que las agencias gubernamentales transforman cada vez más las órdenes de registro en redes digitales. Es inconstitucional, es aterrador y sucede todos los días. Nadie debería temer que la policía llame a su puerta simplemente por lo que ofrece el algoritmo de YouTube. Me horroriza que los tribunales permitan esto.”
Respecto a esto, Matt Bryant, portavoz de Google indicó:
«Con todas las demandas de aplicación de la ley, tenemos un proceso riguroso diseñado para proteger la privacidad y los derechos constitucionales de nuestros usuarios mientras apoyamos el importante trabajo de aplicación de la ley. Examinamos cada demanda de validez legal, de acuerdo con la jurisprudencia en desarrollo, y rutinariamente rechazamos demandas demasiado amplias o inapropiadas de datos de usuario, incluida la objeción total a algunas demandas».
En pocas palabras, estamos jodidos. Básicamente, las autoridades publican videos de cómo hacer actividades ilegales o al borde de la legalidad, solo para ver quién ve esos vídeos. Y al mismo tiempo, Google permite que esos vídeos se publiquen, y luego comparte la información de quienes los han visto.
Da igual si lo viste por accidente o porque te salió como recomendado y te pareció interesante, si viste el vídeo, eres sospechoso y te investigarán.
Te clasificarán según lo que ves
A pesar de que me parece ilegal lo que está haciendo el gobierno estadounidense en complicidad con Google, creo que si no has hecho, ni pretendes hacer nada malo, no tienes de que preocuparte.
Sin embargo, es cuestión de tiempo de que el gobierno empiece a publicar vídeos de personas simpatizando con Palestina o Israel, simpatizando con Rusia o Ucrania, videos de personas promoviendo las criptomonedas, videos de gente promoviendo ideales de extrema izquierda o extrema derecha, y luego pedirle a Google la información sobre quien vio cada tipo de video.
Y ahí es dónde viene lo peligroso. Recientemente en el feed de YouTube me salía un vídeo titulado «Por qué no deberías unirte al servicio militar voluntario». No entré a verlo, pero lo guarde para verlo más tarde. Y ahora me pregunto, si ese tipo de vídeos los están publicando quién los ve y que comenta quien los ve.
Llegado a este punto, lo mejor es usar un VPN descentralizado y ver YouTube con una cuenta anónima. Así, al menos se la pones difícil a estos gobiernos. O puede que consigas todo lo contrario y que se fijen más en ti.
En todo caso, no me fío de las intenciones de estos gobiernos, u me preocupa aun más que Europa permita este tipo de prácticas a gobiernos extranjeros.
Fuente: Forbes
